Respecto a las canciones son, sobre todo, tradicionales cajamarquinas y peruanas, como huaynos, carnavales, coplas o baladas. Pero también éxitos internacionales clásicos y hasta canciones originales. Además, tanto don Jaime como don Víctor son auténticos artistas completos, ofreciendo también historias interesantes de sus vidas y ofreciendo su poesía. Los precios son los habituales, y los tragos están muy bien elaborados, destacando el Usha-dry y el «cielo cajamarquino» (que, como el original, es de un color azul intenso). Entrar cuesta 5 soles, a modo de propina para los músicos que se reúnen allí cada noche.